Momentos como este son los que hacen replantearme tantas cosas. Renace también, poderosamente, la melancolía que siempre guardo por temor, porque la conozco bien y se que no es del todo buena, además cuesta duro trabajo superarla.
Cuando tomé la guitarra y me senté a intentar alguna melodía, sentí increíblemente el poder del silencio, y lo mucho que puede transmitir. Entonces dejé la guitarra sin siquiera esbozar alguna desencajada nota y quise salir a caminar, a dejar alguna huella imaginaria sobre las acaloradas calles de mi desordenada ciudad, sintiendo el viento en la cara, entonando alguna triste canción sacada de algún recuerdo, y dejar que los pensamientos revolotearan libres en mi cabeza, buscando motivos, razones, intentando comprender, experimentando sentimientos y sencaciones... dejando caer alguna lágrima por el camino, quizás.
En fin, nunca lo hice, opté por dejarme caer en mi cama y llorar hasta quedarme dormido.
2 comentarios:
jajaja solo keria escupir.. ke adoro la manera ke tienes de expresarte... y ke ... no estes triste... al menos no hoy ke es tu lindo cumpleañitusss!!... te kiero demasiado!!! =)
mi psicopateo innato acaba de decirme q estuviste de cumpleaños ... :( y yo hablé contigo y no supe :( me siento como el hoyo!, pero algo me hizo volver a tu blog y pasar x tu facebook, ves! x lo menos me di cuenta tarde pero me di cuenta.
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